Reflexión Paranoica

Vivimos en un mundo prediseñado, prediseñado por los amos del mundo, sí, esos que están forrados de pasta y que presionan a los gobiernos para que se dobleguen a sus peticiones obviando si es mejor o peor para los ciudadanos. Sí, esos que deciden las variaciones del mercado, que al fin y al cabo son sólo dígitos en una pantalla de ordenador, pero esas variaciones dirigidas por no-sé-quien repercuten en nuestra vida diaria, si sube o baja la barra de pan  o la gasolina. Pero mientras todo esto ocurre, y aun siendo conscientes de ello, seguimos siendo parte de su juego, comprando sus productos fabricados en países subdesarrollados hechos por niños, y aun a sabiendas de ello y que nos parece una aberración, seguimos adquiriendo esos productos tan sólo porque un departamento de marketing nos crea esa necesidad.

Necesidad de qué? De ir a la moda? O de sentirse aceptado socialmente? Porque claro, si alguien a nuestro alrededor lleva un móvil antiguo o no juega al juego de moda automáticamente pensamos que es un inadaptado social o lo miramos mal, condenándole por no tener los mismos gustos que la mayoría, suprimiendo la libertad de elección. Porque nuestra “libertad de elección” no deja de estar sesgada por mensajes subliminares.

También nos dividen, división de religiones, partidos políticos, equipos de futbol… Todo para alimentar la confrontación entre las personas. La paz es posible, pero no interesa. Que por qué digo esto? Porque si hubiera paz se hundiría el negocio del armamento, cuyos accionistas son miembros de los diferentes gobiernos o lobbies con mucha influencia ellos.

El futbol, ese gran negocio, y esa gran arma de distracción para que estemos entretenidos disfrutando de él mientras se toman las grandes decisiones que tendrán impacto en nuestra vida diaria. Esta “arma” tiene una gran influencia… Sino, responderme a una pregunta: creéis que se manifestaría más gente por una decisión política o por la desaparición de un equipo de futbol? Ahí dejo la pregunta…

Pero la culpa no es de nosotros, no. La culpa es de ellos que no nos explican de manera directa todo esto, ni hay que sentirse todo. Sólo hay que ser consciente de ello y aun así entre en este “maléfico juego”, viendo el futbol o comprando su tecnología cada “x” tiempo gracias a la obsolescencia programable.

También soy consciente que me criticarán por pensar y escribir esto, me llamarán loco o paranoico, pero me apetecía compartir estos pensamientos con quien quiera leerme.